Asociación andaluza de bibliotecarios

ENTREVISTAS CON LOS PONENTES DE LAS XX JORNADAS BIBLIOTECARIAS DE ANDALUCÍA:

Gloría Pérez Salmerón

Glòria Pérez-Salmerón, Presidenta de la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA) para el período 2017-2019

¿Crees que la imagen de marca de nuestras bibliotecas y nuestra profesión a nivel internacional está suficientemente clara y arraigada en la sociedad? ¿Y a nivel nacional?

Sí, creo que la imagen de marca de la biblioteca está clara porque es un servicio público que la sociedad reconoce y respeta, muy bien valorada a nivel internacional. Además, está bien posicionada a niveles altos en el ranquin de los servicios públicos que se prestan a nivel municipal y en las comunidades académicas, como hemos constatado en encuestas y estudios que se han realizado a nivel nacional.

Los bibliotecarios hemos contribuido a ello y llevamos muchos siglos al pie de obra, edificando y tendiendo puentes. Lo que nos deberíamos cuestionar es, si realmente trabajamos para que la biblioteca tenga un marchamo, una marca de calidad. Y la respuesta a esta pregunta, desde mi punto de vista, es que aún andamos lejos de que nuestras bibliotecas orienten su oferta de servicios para ser identificadas con una marca de calidad. Una marca de singularidad que podría posicionarla mejor individualmente y fortalecer la imagen de calidad del sector en su conjunto.

Sin embargo, hay que ser positivos, y reconocer que hay dignísimos ejemplos de ello y a nivel nacional también.

- ¿Qué iniciativas de IFLA en relación con este tema nos puedes adelantar?

La IFLA tiene un reconocimiento universal, con miembros en más de 150 países y se posiciona al más alto nivel de representación y se eleva como la voz global de los bibliotecarios, las bibliotecas y de todos sus usuarios, es decir, la sociedad. Su marca se extiende hoy día, no solo en la vertiente del trabajo técnico de las bibliotecas con sus guías y estándares bibliotecarios - trabajo que ha realizado desde su fundación hace más de 90 años - sino que además ha sabido buscar un posicionamiento singular como cabecera de la visión de las bibliotecas y del acceso a la información para el desarrollo.

La federación internacional ha sabido crear en estos últimos años su propio marchamo. Su prestigio está reconocido más allá del sector bibliotecario mundial. Lo está en el ECOSOC de las Naciones Unidas, en la UNESCO, en la OMPI (Organización Mundial de la Propiedad Intelectual) y otros foros de alto nivel.

Tengo que reconocer que en la IFLA hemos trabajado intensamente para conseguir este posicionamiento mediante su propia transformación externa e interna. Dos procesos que han ido en paralelo retroalimentándose para adaptarnos y adelantarnos al futuro.    

    

- ¿Qué nos puedes contar de manera muy breve de temas tan importantes como IFLA Global Visión, ODS, etc.?

A estas alturas, creo que ya habréis oído hablar de las iniciativas que la IFLA ha puesto en marcha para conseguir su transformación.

En primer lugar, ante la globalización y el nuevo paradigma del acceso y uso de la información, buscando alinear los objetivos de las bibliotecas a los objetivos generales de la humanidad: los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para contribuir mediante el acceso significativo a la información a través de las bibliotecas, a preparar a las sociedades a alcanzar el desarrollo sostenible. Para ello, hemos empoderado a los bibliotecarios para sensibilizar y trabajar a nivel local en las iniciativas de desarrollo sostenible nacionales.

En segundo lugar, estamos aprovechando el impresionante proceso participativo de la Visión Global de las Bibliotecas para identificar los mayores retos y las oportunidades en las que podemos trabajar para crear nuestro propio futuro de forma organizada y no perecer en el intento. 

 

- ¿El futuro es inminente que va a hacer cambiar nuestros perfiles profesionales. ¿Qué nuevos roles, nuevos conceptos y nueva imagen se nos avecina a las bibliotecas?

El futuro empieza hoy. Nuestros perfiles están en plena evolución. Si no, ¿decidme, estáis trabajando exactamente en aquello que os preparasteis en la universidad? Seguro que no. Yo al menos no. Los servicios bibliotecarios requieren nuevas competencias y debemos adquirirlas y adaptarnos a las necesidades emergentes de las comunidades y sociedades a las que servimos.

Se hace difícil diagnosticar el futuro si lo dejamos en manos de otros, pero nosotros si que podemos trabajar en nuestro propio futuro. Podemos y debemos crearlo, marcar el camino.

En las Jornadas os contaré un claro ejemplo en el que las predicciones pueden llevar a engaño. Os dejo con el gusanillo para que os inscribáis a las Jornadas.

- ¿Qué esperas de las XX Jornadas Bibliotecarias de Andalucía?

Aprender, siempre aprendemos de los intercambios profesionales que tenemos. Por supuesto, ver a los colegas, saludarles y divertirme con ellos. Y saborear nuevamente Andalucía, ya estoy tardando mucho en pisar la tierra andaluza.

- ¿Qué opinión te merece el trabajo de la AAB en favor de la profesión?

¡Como me comprometéis! ¿Cómo voy a hablar mal de mis anfitriones?

Bromas a parte, conozco la labor que está realizando AAB desde hace mucho, ya que he compartido Junta Directiva de FESABID con AAB en nada menos que cuatro ocasiones y me parece que estáis trabajado proactivamente a favor de la profesión. Además, tenéis una fuerte repercusión en las redes sociales lo que significa que estáis apostando por la marca AAB.