ENTREVISTAS CON LOS PARTICIPANTES Y COLABORADORES DE LAS XVIII Jornadas Bibliotecarias de Andalucía

ENTREVISTAS CON LOS PARTICIPANTES Y COLABORADORES DE LAS XVIIIJBA: 

Ana Carrillo Pozas

Ana Carrillo Pozas. 

Biblioteca Nacional de España. Jefa del Servicio de Intranet

¿”Innovación, profesión y futuro”, lema de nuestras XVIII Jornadas Bibliotecarias de Andalucía, en qué lugar crees que se encuentra ahora mismo la profesión?

Creo que nuestra profesión arrastra un estado de incertidumbre desde hace unos años, motivado por los cambios radicales que se llevan produciendo en el ámbito de la información y de los sistemas de transmisión del conocimiento. Es como si no nos hubieran invitado a la fiesta, por sugerir una metáfora. Pero al mismo tiempo, somos una profesión con una flexibilidad tremenda para adaptarnos a los cambios. Esta capacidad es la que creo que nos va a permitir resituarnos en el ecosistema de la información. Eso sí, tendremos que hacer un esfuerzo de reinvención y liderazgo.

¿Qué destacarías para los profesionales de nuestro sector, que nos deparan los tiempos presentes y venideros?

Destacaría el camino emprendido por la Administración en favor de la apertura de datos públicos, impulsado por la legislación vigente. En este terreno parece que los profesionales de la información nos hemos quedado al margen, pero somos tremendamente necesarios en temas como el análisis, identificación y descripción de la información, en los procesos de catalogación e indexación, metadatos, normalización de taxonomías, o de generación de conocimiento a partir de la información ofrecida en bruto.

Creo también que estamos en un momento clave para buscar sinergias entre archiveros, bibliotecarios, documentalistas, pues la integración de nuestros conocimientos, que abarca todos los prismas de la gestión de la información, nos posiciona en un papel único y estratégico.

Por todos es asumido ya el valor social de las bibliotecas, pero ¿cual crees que es el verdadero valor de nuestra profesión para la sociedad actual?

Creo que nuestros valores son muchos y no solo uno. Ya solamente el prestar nuestros servicios en las bibliotecas nos impregna de un valor esencial de servidores públicos, de profesionales convencidos de revertir a la sociedad el conocimiento acumulado.

Pero destacaría además nuestra búsqueda de la democratización o de la equidad en el acceso a la información, y nuestra defensa del patrimonio bibliográfico y documental como un bien de la sociedad que además hay que preservar.

¿Qué crees que aportas a las Jornadas Bibliotecarias de Andalucía?

Quizá el conocimiento sobre un tema de nuestra profesión escasamente tratado, como es el de la comunicación social en el interior de las organizaciones.

¿Granada y la Facultad de Comunicación y Documentación de al UGR, lugar perfecto para hablar de la profesión y del futuro?

Por supuesto. Si no estoy equivocada, creo que la primera escuela de Biblioteconomía y Documentación en España, estrictamente universitaria, se creó precisamente aquí, en la Universidad de Granada, allá por los años 80. Así que es un marco excepcional para hablar de lo que nos puede deparar el futuro inmediato.

¿Cuál es tu opinión de la labor desarrollada por la Asociación Andaluza de Bibliotecarios?

Creo que la Asociación Andaluza de Bibliotecarios ha defendido e impulsado siempre a la profesión proponiendo temas innovadores en sus Jornadas. Tengo especial aprecio por el “Boletín de la AAB”. Mis oposiciones las preparé en la Sala de Documentación Bibliotecaria de la Biblioteca Nacional, leyéndome, entre muchos otros recurso, claro, sus artículos, y aprendiendo de tantos y tantos profesionales.

¿Qué le dirías al resto de los profesionales andaluces para que compartan con nosotros nuestras Jornadas?

Les animo a que asistan, pues son una oportunidad para empaparse de ideas nuevas, aprender, e incluso enseñar y contar lo que están haciendo en sus lugares de trabajo, estableciendo contactos nuevos. Y como no, para encontrarse con colegas y amigos en un lugar único.